El pH y su Importancia en el Cuidado de la Piel y la Salud Holística
El pH es una medida de la acidez o alcalinidad. Para la piel, un pH equilibrado es fundamental ya que ayuda a mantener una barrera cutánea saludable, protegiéndola de infecciones e irritaciones.
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Además de su papel en la piel, el pH es crucial para la salud general del cuerpo. Un pH desequilibrado puede causar problemas de salud como cálculos renales, osteoporosis y problemas digestivos.
Dentro del enfoque holístico, la alimentación desempeña un papel vital. Los antiguos maestros de la medicina tradicional china solían decir que "quien no sabe comer, no sabe vivir". Para estos sabios, un pH demasiado ácido indica un exceso de Yang, mientras que un pH alcalino significa un exceso de Yin.
Si observas tus hábitos alimenticios y cómo evolucionan, notarás una tendencia particular hacia alimentos alcalinos o ácidos. Estos gustos pueden cambiar con las estaciones energéticas.
Alimentos considerados ácidos incluyen productos lácteos, carnes y alimentos ricos en azúcar. Hoy en día, existe una tendencia hacia el exceso de acidez en el cuerpo, pero esto debe ser verificado a través de observación personal o mediante la medición. Puedes comprobarlo fácilmente usando tiras de pH disponibles en farmacias.
Alimentos alcalinos incluyen, entre otros, vegetales verdes, frutas y nueces.
El equilibrio entre alimentos ácidos y alcalinos es esencial para mantener un pH equilibrado en el cuerpo, pero este equilibrio es personal. Observa tus hábitos y cambios en tus preferencias alimentarias para obtener indicaciones valiosas.
La alimentación holística destaca la importancia de seguir nuestros deseos, pues nuestro cuerpo, de manera inconsciente, busca siempre un estado de salud ideal. Esta capacidad del cuerpo para avanzar hacia el ideal no debe ser perturbada por información general. En este camino hacia el equilibrio holístico perfecto, la percepción y la observación son nuestras herramientas más importantes.
Las dietas occidentales modernas tienden a ser ricas en alimentos ácidos, lo que puede alterar el equilibrio del pH en el cuerpo. Por eso es importante mantener una dieta balanceada y prestar atención a nuestro deseo de consumir alimentos alcalinos.
Alimentos ricos en potasio, como plátanos, aguacates y espinacas, pueden ayudar a equilibrar un pH demasiado ácido. Cítricos como el limón y la lima, sorprendentemente, son considerados alcalinos a pesar de su aparente acidez.
Otros ingredientes alimentarios que pueden ayudar a equilibrar el pH del cuerpo incluyen hojas verdes, hierbas y especias. Verduras de hojas verdes como la col rizada, el brócoli y el coliflor son ricas en minerales alcalinos. Hierbas y especias como la cúrcuma, el jengibre y el romero también tienen efectos alcalinizantes.
El pH natural de la piel ronda los 5,5, lo que es ligeramente ácido en comparación con el cuerpo, que normalmente tiene un pH cercano a 7. Usar productos para el cuidado de la piel que sean demasiado alcalinos o ácidos puede alterar el equilibrio natural del pH de la piel, causando problemas como sequedad, descamación e irritación. Los cosméticos holísticos están generalmente formulados para mantener el pH natural de la piel. Cuando no es así, es para lograr un efecto particular, como en algunos mascarillas o exfoliantes. Por eso se usa una loción o crema ácida al final del ritual de cuidado, para restablecer el pH natural de la piel.